Riguroso y exhaustivo trabajo de investigación, tras sus huellas en Aragón y Cataluña
Decir Fran Martín es hablar de un historiador, docente y con una fuente inagotable de inquietudes y energías. Es hablar de un hombre que ha sabido ganarse la complicidad de su alumnado y conseguir su ayuda para arrancar del húmedo sótano del olvido más de trescientos testimonios, documentación de valor incalculable. Es hablar de una persona que ha sido capaz de hacer levantarse de sus asientos a más de un centenar de personas para entonar, al término de su charla, la conocida "Bajo dos tricolores" de la Ronda de Boltaña.
Y esta tarde de jueves, hablar de Fran Martín es hablar de un amigo que nos visita con un regalo impagable bajo su brazo: el libro "Memorias de un brigadista español", una obra de investigación que parte del diario manuscrito (200 hojas) de López Arrieta un joven aragonés que, viviendo en Francia, deja todo para entrar en España y alistarse para combatir. Un recorrido vital que detalla con nombres de pueblos por los que pasa, anécdotas y sucesos que en ellos ocurren, observaciones e impresiones que calan en este idealista y que marcan su vida.
No es un diario de guerra al uso. Buena parte del mismo se relata tras caer herido en un muslo y deber, en un entorno de caos y desmantelamiento de la esperanza, buscarse la vida para encontrar una atención médica y unos cuidados mínimos que le permitan sobrevivir.
Si ya la historia apasiona y emociona, la entonación del orador (frases cortas, cadenciosas pero rápidas, en ráfagas que superponen expresiones y están al borde de la falta de aire) obra en los espectadores un efecto hipnótico.
Como buen presentador, amaga historias, cuenta pequeños detalles y alimenta el hambre por conocer hasta el último detalle acerca de cómo lo contó y cómo lo sufrió, en esta joya en forma de diario, el sargento accidental que nunca quiso pasar de cabo.
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