La agrupación republicana oscense recuerda y homenajea a sus asociados fallecidos. Agradecimiento por el tiempo compartido y brindis en su memoria.
Muchos, en esta ciudad, recuerdan el 8 de enero del 2010 por el fallecimiento de Manuel Benito Moliner, un referente cultural de la misma; político, etnólogo, escritor y divulgador de la cultura e historia de Aragón, miembro del Instituto Aragonés de Antropología, del Instituto de Estudios Altoaragoneses y de los Amigos de Serrablo. Y, también, cofundador del Círculo Republicano Manolín Abad de Huesca y uno de sus baluartes hasta su temprana muerte. Por ello, ésa es la fecha que decidió institucionalizar el CRMAHU para rememorar la figura de los hombres y mujeres que compartieron anhelos y esperanzas en un mismo camino.
Cada 8 de enero, un grupo de familiares y amigos se concentra en la parcela conocida como "Cementerio Libre" de la necrópolis oscense para rememorar anécdotas, situaciones vividas y reafirmar convicciones. Todo ello junto a la placa, auténtico punto de encuentro ya, que indica el lugar donde "el viento tricolor esparció tus cenizas", en mención dirigida a Manuel Benito y extrapolable desde este momento a dieciocho personas, dieciséis hombres y dos mujeres. Personas que utilizaron su propia vida como ejemplo de lucha y sacrificio en circunstancias penosísimas (guerra española, exilio, resistencia en la Francia ocupada, resistencia en la España de Franco ...), personas que hicieron de una tempura y un risotto un motivo de celebración y unión en momentos de desánimo, personas que con unas agujas de tricotar confeccionaron complementos que vistieron de colores republicanos chaquetas y vestidos, personas que de unos pinceles extrajeron arte y desobediencia; personas , en suma, que acompañaron una senda de, siempre, extrema dificultad sin pedir nada a cambio.
Diversas intervenciones se suceden en esta fría mañana. Palabras de bienvenida a este nuevo acto que finalizan en un emotivo brindis y una próxima cita para, en homenaje a esta historia de la España republicana, tan escamoteada y diluida, conmemorar la proclamación de la primera república española, en cuyo advenimiento tanto tuvo que ver nuestro vecino Manolín Abad y sus compañeros, en el ingrato y duro papel de protomártires.