Ante los llamados, por parte de diversas organizaciones políticas, a la convocatoria de un referéndum Monarquía – República, este Círculo desea, sin poner en duda la buena fé y mejores intenciones de quienes por ello abogan, hacer las siguientes consideraciones:
1- Una consulta de este tipo, con las condiciones actuales de NO VINCULANTE, TEMPORALIDAD DE RESULTADO NO LIMITADA y ABSOLUTA PARCIALIDAD EN LOS MEDIOS, no es sino una manera de legitimar la institución monárquica por tres generaciones más, siempre con la cantinela a soportar de que el rey fue apoyado en consulta popular al igual que ahora se justifica la presencia del actual monarca como resultado del refrendo a la Constitución actualmente en vigor obviando aspectos tales como el ambiente crispado y amenazante en el que se desarrolló su gestación y aprobación.
2- Hay cuestiones que no son objeto de consulta. Por ejemplo, aquellas que
cuestionan derechos humanos o aspectos básicos del contrato social como el de la igualdad ante la ley. La monarquía es la enfermedad del cuerpo social que permite la existencia de una familia que está por encima del resto y que tiene una serie de privilegios por razón de cuna. En este sentido, nos parece, incluso, una ofensa a la inteligencia de la ciudadanía preguntarle si desean permitir un estado de agravio de ese tipo.
3- La Tercera República, por cuya próxima proclamación abogamos, tiene una hoja de ruta ya conocida: La declaración de las fuerzas políticas, que así lo sean, establecidas o emergentes, como decididamente republicanas y la colocación, como primer punto de sus respectivos programas electorales, de la abolición de la monarquía. Y, tras unas elecciones victoriosas, obrar en consecuencia, en acto de justicia histórico de restitución de la legitimidad republicana.
CRMAHU
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